31 de enero de 2010

Escritores de mal humor


Esta semana fui a un cóctel con motivo del fallo de un premio de literatura infantil y juvenil y allí coincidí con un viejo colega. Estaba enfadado porque, según dijo, "no hay forma de que las cosas empiecen con puntualidad". Tiene razón, aunque si no fuera por la impuntualidad no estaríamos hablando. Ni habría podido saludar a un montón de amigos, a algunos de los cuales sólo les veo en este sarao y, por tanto, una vez al año. "Si se dice a las siete, es a las siete", apostilló mi colega. Le vi ceñudo, con la mirada algo esquinada. Sé por conocidos comunes que últimamente está algo huraño. Su última novela no vendió mucho, aunque era buenísima (a mí me parece que este amigo mío es uno de los grandes escritores vivos actuales y que precisamente por eso, o sobre todo por eso, vende tan poco). Pero claro, los grandes escritores quieren ser escritores de éxito. Los de éxito quieren ser escritores de culto. Los de culto quieren ser populares. Y los populares quieren ser respetados por sus colegas.
De ello se desprende que el colectivo de los escritores, tengan la edad que tengan y escriban lo que escriban, es uno de los más insatisfechos que existe. Y mi colega es una buena muestra de ello. Lo cual, bien mirado, tiene mucho que ver con el asunto que tanto le perturbaba el otro día, que no era otro que la eterna impuntualidad de las cosas de la vida.
Ay...


La imagen de hoy es de David Kittos, en Flickr

9 comentarios:

Fernando Alcalá dijo...

Pero qué genial reflexión, Care!!!! Me la apunto, por si algún día me da ser uno de los miembros de alguno de esos grupos. Más que nada, para saber hacia dónde tengo que aspirar :P

(Me está encantando Los que rugen!!)

Begoña Argallo dijo...

No es peloteo, pero siempre sacas el mejor partido y nos dejas preciosas reflexiones. Encontrarse con personas que hace tiempo no se ve siempre es agradable. Y eso, quien quiere aprovechar bien el tiempo siempre encuentra un modo,para muestra un botón.
Saludos

Meltalle dijo...

Buenas

Muy bien traído, Care, como siempre sabes hacer, pero ya que metes la pata... ¿por qué no la metes hasta el fondo? Je, je, me refiero al nombre del escritor, así... cómo va a tener éxito. XD

Saludos

P.D.: Hablando de puntualidad...

Meltalle dijo...

Buenas

Ja, ja, no sé si se podrá hacer doble "post", sólo decir que ya
me leí el libro de Shaima. Y
este último volumen me ha
parecído espectacular -¡con lo
que me gusta a mí buscar tesoros!-. Ahora, sólo espero que el décimo, no tarde tanto como su antecesor... Care, toma nota, tómala... XD

Salu2

Begoña Argallo dijo...

Mi hija llevaba tiempo sin encontrar un libro que le gustara. Casi no leía ya, y se pasaba las tardes buscando en internet cosas que la llenaran a falta de motivación. El otro día me traje a casa cuatro libros desde la biblioteca, Inseparables para siempre de Care Santos. La bibliotecaria me dijo que a ver si le gustaban, que era lo que veía para comenzar si yo insistía en esa autora.
Mi hija se rie sola mientras lee, dice que esa niña ( la del libro) la entiende. No lee los libros, se los bebe. Ya está leyendo el tercero y sigue riendo.
Yo estoy leyendo el primero, y me encanta todo lo que se desprende del libro. Creo que enseña todo lo que hay que saber del mundo para hacer felices a los demás y hacerse feliz a uno mismo. Son impagables, pero pienso comprarlos uno a uno.

Meltalle dijo...

Buenas

Ja, ja, Begoña, ¡cúanto te entiendo! Destacar que me ha hecho un poco de gracia la paradoja del final de tu discurso. "Bel" está bien, pero "Los ojos del Lobo" está genial, será que como está narrado en primera persona... contribuye a que se viva la historia con más intensidad y realismo.

Así me gustan los escritores: que sepan emocionar y aflorar un variopinto abanico de sentimientos y sensaciones tan bonitos y especiales en sus lectores... como bien ha sabido expresar antes mi compañera.

Para mí esa es la diferencía fundamental de la gente que tiene éxito en el mundo de la lectura comparada con la que no. Uno puede ser muy culto y saber de muchas cosas, pero poca gente sabe transmitir de la manera tan peculiar que tienes, Care, para que de un modo u otro, nos sintamos los protagonistas de cada una de las historias que, cada cierto tiempo... decides
compartir con nosotros. Muchas gracias.

Begoña Argallo dijo...

Yo llevo años y paños apuntando libros que se supone que uno debe leer para alcanzar un cierto nivel literario. Me encanta escribir y mi hija se queja de que le "peto" el ordenador de archivos para suicidio. (Lo que tiene eso de tener una amiga gótica que es maja, por otro lado, yo le digo siempre que es perlética y ella se muere de la risa).
Care demuestra que para aprender a escribir basta un solo autor, si además sabe crear conciencia en dos pinceladas que te hacen reír; mejor que mejor.

Eva Monzón dijo...

El colectivo de escritores depende tanto del colectivo de editores, de la publicidad que les hagan, que en realidad, está más perdido de lo que debería si sólo dependiera del público que les leyera..., pero cómo acceder a ellos, si encima, hasta en los premios no hay puntualidad¡¡¡¡

besos

evamonzonj.blogspot.com

Meltalle dijo...

Buenas

Begoña, no sabes cuánto entiendo a tu hija y, eso que no sabe lo que la espera... XD Yo también apuesto por la literatura que tenga algún tinte o ápice de humor que cubra o complemente de vez en cuando las historias o narraciones que puedan darle cabida. Y, la verdad que, aunque Care, precísamente -por lo que sé- no es un géreno al que recurra con habitualidad. En algunas ocasiones, como por ejemplo la colección de "Arcanus", sabe mostrar en algunos momentos que, también ese estilo... tampoco se le daría mal.

Eva, supongo que por lo que cuentas, sabes de lo que hablas, yo como escritor amateur: transmitía mi opinión al respecto como más adecuada me parecía.
Es verdad que todo lo que tu cuentas influye -y mucho- y, es verdad que muchas veces, pueda que el mayor sector a quien vaya dirigida determinada lectura... no se concilie a veces, con el sector de lectores que se espera de la misma. Pero, como cualquier trabajo en equipo, todos (ambos grupos) debemos poner de nuestra parte y, cuando una parte falla o no es como se espera... será por y para algo. Sigo pensado que aunque la naracción es una de las partes más importantes de la literatura, todavía sigue siendo más valioso, la capacidad para transmitir, comunicar, informar y aflorar ciertos sentimientos tan motivadores y enriquecedores que consiguen ciertos escritores rellenar y embriagar, en los corazones de tantos lectores que como le ocurre a Begoña, a mí y por lo que veo en tantos otros... contribuya de este modo que nos sintamos tan agradecidos y ávidos por "beber" -como ya decían más arriba- más y más, de ese tipo determinado de literatura.

Aunque, en mi humilde opinión pienso que la suerte y la percepción de cada uno/a a la hora de afrontar, valorar y llevar a cabo determinadas acciones, es un factor muy importante y decisivo a la hora de gozar de menor o mayor dicha, para con con lo que uno se proponga en la vida.