20 de julio de 2012

Minis de verano (1): Árboles


A los árboles nadie les informó de nada. De pronto, de un día para otro, los habitantes de la casa eran distintos. Los de ahora eran más jóvenes, más laboriosos, tenían más niños y la voz más fuerte (o gritaban más). Comenzaron a hacer cambios. La palmera allí, la yuca allá, en este rincón unas matas de tomate. Los árboles son poco dados a las innovaciones, tardan en acostrumbrarse. Lógico: no pueden marcharse cuando algo no es de su gusto. Tener raíces es un gran inconveniente. Resolvieron protestar. Por unanimidad, después de una vegetal y secreta votación, decidieron que aquel verano, el primero para los nuevos inquilinos, no darían ni un fruto. Y se llenarían de bichos oscuros, que lo pondrían todo perdido de babilla pegajosa, infecta, de esa que sólo verla quita las ganas de salir al jardín.

4 comentarios:

Rebeka October dijo...

Me ha encantado este mini de verano!!
Cuando se echa raíces es dificil adaptarse a nuevos cambios. Le pasa a los árboles y nos sucede a nosotros.

Un abrazo.

Begoña Argallo dijo...

Hace años yo trabajaba la huerta, y era lo más fructífero que te podías encontrar. Un día una vecina me dio una noticia: van a traer una fábrica a Asturias que rechazaron en 6 países porque daña árboles y hortalizas.

Eso me sonó tan raro que no quise creerlo. Pero fue cierto, fue llegar esa fábrica y ver que todos los árboles y hortalizas se terminan dañando o pudriendo. Desde entonces el campo ya no es tan fructífero como era y mucha gente dejó de sembrar.
Da que pensar...

Inma dijo...

Si la verdad es que cuando echamos raices avanzar a veces resulta complicado.

Tulsi dijo...

Tener raíces es un gran inconveniente... y si no, que se lo digan al ficus de LMDV.
Gracias por tus historias Care, me haces sobrellevar un verano sin vacaciones de una manera más feliz.
Silvia.