15 de diciembre de 2012

Flor alienígena


Me dije el primer día:
Pues bien, tengo diez años
antes de detestarte
o que me odies;
antes de que el vacío
mortal del mismo tedio
de otras veces
se instale entre nosotros,
antes que nos miremos
una noche a los ojos
y no nos quede nada
que decirnos.

Han pasado diez años
y dos de añadidura
y aquí no llega nadie
de los que yo esperaba.
Las cosas son distintas
esta vez. Por qué razón,
no alcanzo a comprenderlo.

El amor es contigo
como una de esas flores
que crecen a la sombra
en el jardín de nuestra casa nueva:
tan hermoso y tan raro
que parece alienígena;
un espejismo hermoso
que miro boquieabierta,
sin creerlo del todo.



3 comentarios:

Rebeka October dijo...

Una preciosidad de poema, al igual que la flor.

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
Begoña Argallo dijo...

El amor es así, y a veces habla tan raro y se comporta de forma tan extraña, que parece hasta marciano.
=)