1 de enero de 2009

Propósitos para que algo comience

Besar sin llevar la cuenta, frecuentar más el medio acuático, dar mil pasos cada día sin necesidad de fijarles un rumbo, cantar sin bajar el volumen, escuchar el silencio con los ojos cerrados, abrir los ojos en la oscuridad y respirar hondo, no amar nada con prisas, no odiar nada sin causa (ni odiar nada), leer sin mirar el reloj.
Ordenar la mesa de vez en cuando, no sé, una vez al mes, o al trimestre, para por lo menos conocer la sensación de cómo se trabaja en un lugar donde reina el orden.
Caminar por una calle mojada de cualquier parte del mundo en compañía de alguien a quien me guste escuchar.
Escribir como respirar. No se respira deprisa (sería absurdo) ni porque otro te lo pida. De vez en cuando, es necesario recordar cómo se respira, y saber apreciarlo.

La imagen de hoy, de Glenn Karlsen

7 comentarios:

Leodin DaCore dijo...

Me ha gustado especialmente la de Besar sin llevar la cuenta :) . Y la de trabajar en una mesa ordenada! :P Que se cumplan todos, Care ;)

Franz dijo...

Excelentes propositos, desgraciadamente para besar sin llevar la cuenta necesito de otra persona... y lo de trabajar en una mesa ordenada... creo que por mas que lo intente debo resignarme a que mi cretividad se sujete al caos, saludos

Marta Cruces Díaz dijo...

Buenos propósitos para el año 2009

Lola Mariné dijo...

Me encantan todos tus propósitos.
¡Que los cumplas!

Coro dijo...

Care, si me permites voy a copiar tus propósitos.
¡Me encantaron!

¡Feliz año!

Inia dijo...

Care,
ayer me regalaron el libro que has escrito junto a Miralles. Lo he empezado justo después de comer, durante la hora que tengo de descanso. Me ha atrapado!
Me tendras pronto paseandome por la web (que he visto que habeis creado)

Buenos propositos, los tuyos. Yo aún no los he echo... empezamos mal?

Javier Quiñones Pozuelo dijo...

¡Y ser feliz, Care, cuando menos intentarlo! Como soy un recién llegado a la blogosfera (vaya palabro)abro tu blog, veo tu entrada y me sumo con este comentario para desearte que el 2009 te sea propicio, a ti y a los tuyos. Un abrazo, Javier.