15 de febrero de 2011

La respuesta a la pregunta


José Antonio Marina asegura en Teoría de la inteligencia creadora que entre los 4 y los 9 años los niños formulan un total de 33 preguntas por hora.

Es decir, que en esta casa respondemos 1,65 preguntas por minuto, 396 en una tarde normal de día laborable, y 1.188 en un fin de semana.

Acabo de comprender por qué los domingos por la noche estamos exhaustos.

5 comentarios:

Artemisas' Project dijo...

Yo con una que todavía no tiene los 4 ya me agoto, si tuviera que responder por 3 no sé que sería de mi.

Pilar

Jose Luis G. dijo...

Eso contando con que sea un niño normal. Si se da el caso de que el niño es de esos repelentes cerebritos, ¿Cuánto será el promedio de preguntas por hora? ¡Madre mía! Me pongo a temblar de solo imaginarlo.

Lo mejor de todo es que sus preguntas tienen dos patrones: primero preguntan por cosas difíciles de explicar del tipo "¿El perro no habla?" y, a continuación, viene el tipo de pregunta que explica esas 33 preguntas por hora "¿Por qué no? ¿Y por qué? ¿Por qué?"

Care, ese libro sobre la Teoría de la inteligencia creadora debe ser interesante. ¿Lo recomiendas?

Rebeca dijo...

Bufff, no quiero ni pensar, si sucede el dia de mañana, en ese bombardeo de preguntas...y en si seré capaz o no de contestarlas...jajaj

Un abrazo Care!

P.D: Por fin llegó mi pedido a casa del Libro, y tengo entre mis manos EL MEJOR LUGAR DEL MUNDO ES AQUI MISMO...;-)

Rebeca.

Concha Huerta dijo...

Gracias por descubrirnos esta verdad que desconocía. Ya se por que los domingos estaba siempre tan cansada. Un saludo

Rebeca dijo...

Ya me leí el libro, "El mejor lugar del mundo es aqui mismo", sabía que lo más seguro era que me encantase, lo que no sabía era que me iba a dejar tan tocada...y me iba a ayudar a darme cuenta de tantas cosas...
Si hubiera llegado antes a mis manos, quizá me hubiera abierto los ojos, y no hubiera tardado tanto en dejar el pasado a un lado, y comenzar a vivir el presente...

Gracias a ti, y a Francesc, hoy tengo el corazón un poco tocado, pero a la vez aliviado...

Gracias Care!

Un abrazo,

Rebeca.