De jóvenes solemos preferir los meses vulgares, la plena temporada. A medida que envejecemos, vamos aprendiendo a gustar de las épocas intermedias, de los meses indecisos.
Julian BarnesEl loro de Flaubert
1 comentario:
Anónimo
dijo...
Me temo que darle la razón es señal de que el tiempo también pasa para mí (nunca, nunca, al menos por el momento, utilizaré con migo misma la palabra envejecer). Pero además de ser verdad lo que dices, me ha parecido precioso lo de "los meses indecisos". Tiene un cuento, así que me lo quedo, con el permiso del autor (y casi que sin él también).
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Me temo que darle la razón es señal de que el tiempo también pasa para mí (nunca, nunca, al menos por el momento, utilizaré con migo misma la palabra envejecer). Pero además de ser verdad lo que dices, me ha parecido precioso lo de "los meses indecisos". Tiene un cuento, así que me lo quedo, con el permiso del autor (y casi que sin él también).
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