Un viejo escritor, recién elegido Premio Cervantes, vuelve a su pueblo natal -Elda-, después de 70 años, para reencontrarse con los sabores, olores y miradas de su pasado. Nostálgico, con final feliz, maravillosamente escrito y plagado de pequeños detalles.
Os aseguro que suena mejor en voz de su autora y en Elda, pero si lo imprimís y lo leéis en el sofá de casa tampoco estará mal.
Me lo agradecereis, seguro.
Para leer el cuento:
http://www.poudelaneu.com/poudelaneu/documentos/cuento2005.pdf
3 comentarios:
Es cierto, fue genial el cuento en la voz de Elia, y también el tuyo y el de Alfonso, lo he pasado muy bien estos días, y como siempre, encantada de volver a verte.
Es magnífico. Uno de esos casos en que se adivina lo buena gente que es la autora sólo leer el relato. Os lo recomiendo, amigos. Imprimidlo y llevadlo al sofá. La última frase es una maravilla.
Es cierto, es un cuento precioso, muy evocador, la recuperación de un tiempo pasado sin un ápice de nostalgia, por lo menos no de esa triste nostalgia cuya evocación impide gozar el presente. Qué va, es más bien la nostalgia como forma de enriquecer el presente.
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