30 de diciembre de 2012

Charles, le amo


Amado Charles Dickens: antes de que termine este año en que hemos conmemorado con reediciones y relecturas los 200 años de su nacimiento, permítame la osadía de hacerle saber en cinco puntos por qué le amo:

1. Porque sus personajes nunca son lo que parecen ser. Incluso a los ojos de alguien que aspira a emularle y que estudia los seres de ficción con meticulosidad de aprendiz ávido, siempre deparan grandes sorpresas. El estricto es corrupto. El malvado es un alma pura. La loca es una previsora meticulosa. El estafador es un rico heredero de incógnito. Es estupendo.

2. Porque en todas sus novelas hay ideas que quisiera robarle. La novia detenida para siempre a medio vestirse de Grandes Esperanzas. El secretario que es en realidad el propietario de todo de Nuestro común amigo. La aburrida señora de Bleak House mirando siempre por la ventana a la espera de algo emocionante... Hay muchos más.

3. Porque usted me permite conservar, a pesar de todo, la esperanza. Cree en la bondad y la pureza. Cree que el amor lo puede todo. Aboga por causas perdidas. Lucha por hacernos creer incluso aquello en lo que usted mismo ha dejado de creer hace tiempo.

4. Porque influyó usted en algunos de los escritores que más admiro, como Galdós, Pío Baroja o John Irving, tan dickensianos ellos, y porque su vida ha dado lugar a biografías que son casi tan interesantes como sus novelas, como la de Peter Ackroyd.

5. Porque siempre amé más a Wilkie Collins, su buen amigo. A su lado, usted me parecía un ser gris y falto de chispa. He podido reparar mi error, aunque sigo creyendo que Collins era el más talentoso de los dos, a pesar de que no le acompañaran su fama ni su fortuna.

3 comentarios:

Rebeka October dijo...

Una gran entrada y muy buenas razones.
Recién comienzo a conocer a Dickens, con su Oliver Twist, después será la ocasión de Grandes Esperanzas. esperándome en la estantería.
Tu Bleak House Inn está en mi lista, al Corte Inglés no había llegado aún.

Quizá entonces, conozca un poco más de este amor tuyo y de tantos lectores y autores por Charles ;-)
Aunque comienzo a vislumbrar!

Un abrazo Care!

Begoña Argallo dijo...

En la vida real también sucede así, a veces uno se lleva muchas sorpresas con la gente que apenas acaba de conocer. En general hasta ahora pude resolver mi ecuación particular con todas las personas menos una.
Supongo que es alguien tan versátil que reúne en sí todos los defectos y virtudes, capaces de volver loco a un autor.

Entrañable Charles, sin duda.

Mahoney Culkin dijo...

Secundo a Rebeka, yo conocí a este maravilloso personaje histórico: gracias a las películas que tuvieron a bien producir, como adaptaciones de sus obras más consabidas por la mayoría de sus seguidores y neófitos o simpatizantes de Charles Dickens (Oliver Twist, David Copperfield, Grandes esperanzas y Un cuento de Navidad). Personalmente, me decanto por la última de mi lista. Pero, como apunta Care, cada personaje e histora de este magnífico autor... perdurá de una manera especial y contundente tanto en nuestros corazones, como en nuestras mentes.
Charles, donde quieras que estés, "muchas gracias". Eres un fenómeno :D