6 de octubre de 2012

Mi bibliografía y yo

Lo reconozco: hace días que quería tomar esta foto, sólo para confirmar que la bibliografía que he utilizado -que aún estoy utilizando- para la escritura de EL AIRE QUE RESPIRAS, mi nueva novela, puestos los libros unos encima de otros, me supera en altura.

La foto tuvo sus dificultades técnicas (la tomó mi hija Elia, muerta de terror de que la pila se desmoronara de repente, como amenazaba).

En fin, ahí está: empíricamente demostrado.
Y aún quedaron libros fuera.

1 comentario:

Begoña Argallo dijo...

A veces se corre el riesgo de que tanta bibliografía como un libro escrito con rigor necesita, espante al lector que no quiera hacer el recorrido que recorrió su autor, lectura por lectura para escribirlo.

En mi caso necesito que los datos verídicos no ensombrezcan la historia, que sean como la buena esencia que viene en frascos pequeños.

Impresiona consultar tantos libros y mantener la cordura y el hilo conductor de la historia.
(Yo me volvería loca)
Saludos