Hay algunos a los que ese placer nos ha llegado primero a través de la escritura y después, cuando ya lo hemos practicado con el lápiz, hemos sido capaces de practicarlo en el modo oral, vital y en directo.
Y, sí, es un placer. Sobre todo cuando se lleva razón. Pero, claro, esto te lo está diciendo alguien muy cabezón que se cree en posesión de la misma siempre y en todo lugar...
5 comentarios:
Él está de acuerdo contigo, Care, fíjate en su apellido: und Kare
(und es alemán, de acuerdo, debe tener parientes)
ah, qué interesante.
¿Y no por contradecir al placer?.
No, no, el placer no se contradice jamás. Se entrega una a él, feliz, asintiendo.
Hay algunos a los que ese placer nos ha llegado primero a través de la escritura y después, cuando ya lo hemos practicado con el lápiz, hemos sido capaces de practicarlo en el modo oral, vital y en directo.
Y, sí, es un placer. Sobre todo cuando se lleva razón. Pero, claro, esto te lo está diciendo alguien muy cabezón que se cree en posesión de la misma siempre y en todo lugar...
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