Querida Care: Le he dado muchas vueltas estos días al asunto de la cursilería. Lo cursi, hoy día, es la corrección política, el sentimentalismo terruñero de los nacionalistas, el mal gusto representado por los suplementos de "tendencias" y demás. pero hay también una cursilería antigua que ya forma parte de nuestra memoria sentimental, y de la que me declaro sincero partidario. Quizá sea esa cursilería la que me ha dictado el artículo de la semana, "Dependientas", como homenaje a ese gran cursi que fue César González-Ruano. Puedes leerlo en mi blog.
2 comentarios:
Querida Care:
Le he dado muchas vueltas estos días al asunto de la cursilería. Lo cursi, hoy día, es la corrección política, el sentimentalismo terruñero de los nacionalistas, el mal gusto representado por los suplementos de "tendencias" y demás. pero hay también una cursilería antigua que ya forma parte de nuestra memoria sentimental, y de la que me declaro sincero partidario.
Quizá sea esa cursilería la que me ha dictado el artículo de la semana, "Dependientas", como homenaje a ese gran cursi que fue César González-Ruano. Puedes leerlo en mi blog.
Perfecto, José Manuel. En entrada de mañana lo recomendaré para quien quiera darse una vuelta. Yo voy ahora.
Publicar un comentario