20 de enero de 2006

El Señor de los Mil Nombres

Ya he dejado dicho aquí que últimamente paso mucho tiempo con el Diablo. ¡Esta (diabólica) novela me tiene sorbido el seso!

Camilo Castelo Branco, el gran escritor portugués, escribió cosas muy divertidas sobre el objeto de mi obsesión. Aquí va una muestra:

Afirman autores muy insignes que hay seis clases de demonios: ígneos, áureos, acuáticos, subterráneos y lucífugos.
(Dice seis pero en realidad son cinco, ju, la influencia del Maligno, que todo lo ronda)

Ha de saberse que el Demonio tiene caprichos sucios; y en esto, como en muchas otras cosas, parece hombre, excusado sea el lector.

Ambas citas son de un cuento maravilloso titulado ¡Cuánto lo amaba! recogido en la Antología del cuento portugués de Joao de Melo (Alfaguara, 2002), hecha queda la recomendación.
Por cierto, ¿sabíais que una creencia popular rusa afirma que el demonio se infiltra en los libros que encuentra abiertos y permanece en ellos todo el tiempo que desea?
Si no deseáis la compañía del Oscuro, cerrad los libros, amigos y amigas.
Y, para acabar, una frase que me regaló hace pocos días mi amiga (y editora, qué suerte) Alicia Soria. Es de Mark Twain:
El cielo lo prefiero por el clima; el infierno, por la compañía.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo no sé cuántos demonios hay, no me interesa tanto la cantidad ni la tipología del demonio, sino su buen hacer como demonio.... Me pregunto que sería de nuestras vidas sin los demonios que florecen entre la oscuridad de nuestros secretos, en fin no me enrollo más "mataronina" como yo.
un abrazo.

blankutxi dijo...

Sabía esa creencia rusa gracias al Anillo de Irina...

Ramón Masca dijo...

¿Y en los blogs no se meterá también?

Ladynere dijo...

El señor oscuro ese, q se mete donde no le llaman, y al q teme todo el mundo, es omnipotente, como dios. Claro, no existe luz sin oscuridad. No se pq se empeñan en deshacerse de el, estoy segura q si el se va, tambien lo hace dios, o no? no es bueno ni un extremo ni otro.
Ya tengo ganas de leer "El anillo de Irina", me has dejado el gusallino Care.
Javier esteban, creo q si, q ahora mismo el tambien esta leyendonos, o no?

Care dijo...

K.: je, al demonio también se le podría aplicar aquello de "haz lo que quieras, pero hazlo bien".
Javier Esteban: Me lo tomo como una proposición formal.
Blankutxi, Ladynere: Escribo para gente como vosotr@s. Gracias.

Anónimo dijo...

Si recuerdo bien, "Belial" es otro de los nombres. La fuente no es ilustre: la película "El exorcismo de Emily Rose"

Anónimo dijo...

A mí el diablo como Príncipe de las Tinieblas siempre me ha empachado un poco, la verdad. Será mi faceta republicana, no sé. Pero hay unos cuantos demonietes que, por poco regios, sí me caen simpáticos: 1) el demonio de Tasmania (de Warner) 2) el diablillo de la Luz Insuficiente (de Dilbert); 3)Hellblazer (de DC); 4) Ludión (de Descartes)
Care, ya sé que tú incluirías a Bartimateo, el demoniete de J. Stroud, pero aún yo no he leído el libro…
Ah! Y no olvidemos esta "simpática" canción infantil:

“El patio de mi casa
es particular
Cuando llueve se moja
Como los demás

Agáchate
Y vuélvete a agachar
Que las agachaditas
No saben bailar

Hache, y, jota, ka,
Ele, eme, ene, a
Que si tú no me quieres
Otro amante me querrá

Chocolate, molinillo,
Corre, corre que te pillo.
¡estirad, estirad,
que el demonio va a pasar!”